Advertencia al joven sociólogo

Hacer encuestas, otra profesión de alto riesgo en México

Cierto que no es agradable que un desconocido llame a la puerta de casa y empiece a preguntar sobre temas de los que a lo mejor a uno no le apetece hablar. Por eso un encuestador cuenta siempre con la posibilidad de un portazo en las narices. Eso en cualquier parte del planeta y no pasaría de ahí. Salvo si el sondeo se hace en México y en una zona en la que no es bien recibida ninguna pregunta.

Esa zona es Apatzigán, en el oeste del estado de Michoacán, donde hace solo unos días detuvieron a uno de los líderes del cártel de Los caballeros templarios, donde este grupo lucha contra el de la Familia por el control del tráfico de drogas sintécticas, y donde desde el sábado pasado no paran de desaparecer encuestadores.

En los últimos cuatro días se ha perdido la pista de nada menos que nueve trabajadores de dos empresas diferentes especializadas en sondeos. La tesis oficial es que lo más probable es que hayan sido secuestrados, aunque, que se sepa, aún no se ha producido petición de rescate alguno.

Lo único cierto es que el sábado, tres de los empleados de la conocida empresa mexicana Mitofsky fueron a Apatzigán a realizar una encuesta política (México está a menos de un año de las elecciones presidenciales y los partidos están en plena discusión para elegir a sus candidatos) y no regresaron al hotel junto con sus otros 33 compañeros.

Al no saber nada de ellos, otros tres salieron en su búsqueda y también desaparcieron sin dejar rastro. Y ayer lunes, otros tres encuestadores de la empresa Parametría tampoco regresaron con sus cuestionarios respondidos, según ha hecho puúblico este martes sus jefes.

"Nos tomó esto por sorpresa ayer", ha declarado a Efe Francisco Abúndiz, director asociado de la empresa, la segunda de sondeos afectada por esta situación en el municipio de Apatzingán.

La situación es tal que las empresas de investigaciones de opinión y análisis de resultados han convocado una reunión para fijar una posición común ante la inseguridad de sus empleados.

Desde el Gobierno, el portavoz de Seguridad Nacional, Alejandro Poiré, ha confirmado esta mañana que las investigaciones aún no han dado con pista alguna sobre el paradero de los encuestadores desaparecidos. "Es un caso que subraya la necesidad de acelerar los mecanismos que tenemos para combatir delitos como el secuestro y de otra naturaleza, particularmente en esta zona del país", ha subrayado Poiré.

Lo cierto es que no es la primera vez que se escucha hablar de los riesgos que corren los encuestadores en algunas zonas de México. Ya cuando se elaboró el nuevo censo de población, hace unos meses, el organismo público alertó sobre la imposibilidad de entrar en municipios de Chihuahua o Tamaulipas tomados por el 'narco'.


(Sacado de acá, facilitado por Hugo Rabbia)