John Lennon fue hincha de Racing
En un video que alguien dice haber visto, el hombre que lideró los Beatles expresa su fanatismo por la Academia. Parece mentira, pero parece que no. La increíble historia.
Parece mentira, pero parece que no. Porque parece que hubo un video que parece alguien vio una vez, aunque parece que ahora nadie lo tiene. Ahí, parece, está la prueba: parece que John Lennon fue hincha de Racing y parece que lo contó en una entrevista.
—¿Te interesa el fútbol? –le preguntaron.
—No, la verdad que no –contestó John.
—…
—Espera, ¿cómo se llama el equipo que juega contra el Celtic? ¿Racing? Ey, ¡me gusta Racing! ¡Viva Racing! ¡Soy de Racing!
Así como a usted le parece que lee: lo que le parece, es así.Y está Bobby Flores, especialista en rock, para transformar apariencias en afirmaciones: “¡Es verdad! Yo vi el video. Me lo mostraron en Londres, hace veinte años. Fue una nota corta, no pasó en una conferencia de prensa, por eso no se debe haber difundido esa imagen. Estaban John, George, Ringo y Paul. Y Lennon habló de eso, en la época de la final del mundo. (Juan Alberto) Badía me dijo que también sabía la historia. ¡Es cierto!”.
Lennon, sí, el Beatle, el hombre que militó por la paz, el marido de Yoko Ono, el tipo que fue cruelmente asesinado por un fanático. Ese, hincha de Racing. De Racing, el de Avellaneda, eh.
El equipo de John. Hay que viajar hasta 1967, cuando el Celtic de Escocia y Racing disputaron la final de la Copa Intercontinental. Los dos querían llevar un título mundial por primera vez para sus países. Lennon se inclinó por el de camiseta celeste y blanca por un solo motivo (parece): la rivalidad, el odio, entre ingleses y escoceses. Y trajo suerte. En Montevideo, el gol de Juan Carlos Cárdenas le dio la victoria al equipo de Juan José Pizzuti. El Chango alimenta la historia: “En Inglaterra, se me acercó un rockero a decirme que Lennon había hecho fuerza por nosotros. Me contaron que, el mío, fue uno de los goles que más festejó. Me hizo muy feliz saberlo, fue un honor”.
El Beatle futbolero. Martín Aragón, conductor de Mundo Beatle, por FM Milenium, cuenta que no hay documentos que certifiquen la simpatía de Lennon por la Acadé, aunque no es la primera vez que escucha la historia. “Yo se lo pregunté a Julia, hermana de John, y me lo negó. Lo que sí me contó es que él era fanático del cricket, pero no lo decía porque es un deporte de elite y sentía que no quedaba bien que a él le gustara eso”. Hay historias de Lennon vinculadas al fútbol. En su país, su equipo era el Liverpool. Para la tapa del disco Sgt. Pepper’s… fue el único que eligió a un futbolista: Albert Stubbins, que jugó en los Reds. En Walls and bridges, por ejemplo, aparece un dibujo de cuando él tenía 11 años, de nenes jugando al fútbol: se ven dos camisetas rayadas (la del Newcastle) y una roja (¿del Liverpool o del Arsenal?). Y además, en el Album Rojo y el Azul (dos compilados) la elección de los colores no fue arbitraria: John optó por el primero, por el Liverpool, y Paul por el segundo, por el Everton, el otro equipo de la ciudad.
¿Racing? Bueno, parece que hay referencias a Independiente en la canción Imagine: “Ningún infierno debajo de nosotros, arriba de nosotros, solamente cielo”. Y que habla de la hinchada en el inicio de la segunda estrofa de Don’t let me down: “Nadie me amó como ella me ama”.
Los otros hinchas. No fue sólo Lennon el que alentó a Racing en aquel partido. El actor Sean Connery también lo hizo. “El compartió vuelo con nosotros en el primer partido. Y fue a la cancha. Pasó por el vestuario para desearnos suerte. Quería que ganáramos porque era hincha del Rangers, rival del Celtic. En esa época él era el Agente 007, entonces bromeábamos con eso. Ese día fue hincha de Racing”, detalla Cárdenas.
Pelé declaró una vez que en Argentina su equipo era Racing porque le gustaba la hinchada, la gente. Y el Chango cuenta que el origen del fanatismo del brasileño fue en la década del ’60: “Jugamos amistosos contra el Santos y vino a comer asados con nosotros. Decía que le gustaban los colores de la camiseta. Una vez, en medio de un partido, (Federico) Sacchi le tiró: ‘Negro, portate bien que vos sos de Racing, eh. Y Pelé se rió’”. Y Juan Domingo Perón también integra la lista, aunque Antonio Cafiero afirme lo contrario.
El folclore racinguista está rodeado de mitos, de historias tan insólitas que podrían ser parte de algún guión de Pedro Saborido. Pero que no, acá están: un club y una hinchada se apoderan de ellas. Y lo hacen sin ningún prurito, eh. Lo hacen (se lo creen, lo viven en carne propia, se enorgullecen), cuando en realidad muchos –¿el resto del fútbol argentino, quizás?– piensan todo lo contrario: creen que es ridículo. Porque parece mentira, pero parece que no.
—¿Te interesa el fútbol? –le preguntaron.
—No, la verdad que no –contestó John.
—…
—Espera, ¿cómo se llama el equipo que juega contra el Celtic? ¿Racing? Ey, ¡me gusta Racing! ¡Viva Racing! ¡Soy de Racing!
Así como a usted le parece que lee: lo que le parece, es así.Y está Bobby Flores, especialista en rock, para transformar apariencias en afirmaciones: “¡Es verdad! Yo vi el video. Me lo mostraron en Londres, hace veinte años. Fue una nota corta, no pasó en una conferencia de prensa, por eso no se debe haber difundido esa imagen. Estaban John, George, Ringo y Paul. Y Lennon habló de eso, en la época de la final del mundo. (Juan Alberto) Badía me dijo que también sabía la historia. ¡Es cierto!”.
Lennon, sí, el Beatle, el hombre que militó por la paz, el marido de Yoko Ono, el tipo que fue cruelmente asesinado por un fanático. Ese, hincha de Racing. De Racing, el de Avellaneda, eh.
El equipo de John. Hay que viajar hasta 1967, cuando el Celtic de Escocia y Racing disputaron la final de la Copa Intercontinental. Los dos querían llevar un título mundial por primera vez para sus países. Lennon se inclinó por el de camiseta celeste y blanca por un solo motivo (parece): la rivalidad, el odio, entre ingleses y escoceses. Y trajo suerte. En Montevideo, el gol de Juan Carlos Cárdenas le dio la victoria al equipo de Juan José Pizzuti. El Chango alimenta la historia: “En Inglaterra, se me acercó un rockero a decirme que Lennon había hecho fuerza por nosotros. Me contaron que, el mío, fue uno de los goles que más festejó. Me hizo muy feliz saberlo, fue un honor”.
El Beatle futbolero. Martín Aragón, conductor de Mundo Beatle, por FM Milenium, cuenta que no hay documentos que certifiquen la simpatía de Lennon por la Acadé, aunque no es la primera vez que escucha la historia. “Yo se lo pregunté a Julia, hermana de John, y me lo negó. Lo que sí me contó es que él era fanático del cricket, pero no lo decía porque es un deporte de elite y sentía que no quedaba bien que a él le gustara eso”. Hay historias de Lennon vinculadas al fútbol. En su país, su equipo era el Liverpool. Para la tapa del disco Sgt. Pepper’s… fue el único que eligió a un futbolista: Albert Stubbins, que jugó en los Reds. En Walls and bridges, por ejemplo, aparece un dibujo de cuando él tenía 11 años, de nenes jugando al fútbol: se ven dos camisetas rayadas (la del Newcastle) y una roja (¿del Liverpool o del Arsenal?). Y además, en el Album Rojo y el Azul (dos compilados) la elección de los colores no fue arbitraria: John optó por el primero, por el Liverpool, y Paul por el segundo, por el Everton, el otro equipo de la ciudad.
¿Racing? Bueno, parece que hay referencias a Independiente en la canción Imagine: “Ningún infierno debajo de nosotros, arriba de nosotros, solamente cielo”. Y que habla de la hinchada en el inicio de la segunda estrofa de Don’t let me down: “Nadie me amó como ella me ama”.
Los otros hinchas. No fue sólo Lennon el que alentó a Racing en aquel partido. El actor Sean Connery también lo hizo. “El compartió vuelo con nosotros en el primer partido. Y fue a la cancha. Pasó por el vestuario para desearnos suerte. Quería que ganáramos porque era hincha del Rangers, rival del Celtic. En esa época él era el Agente 007, entonces bromeábamos con eso. Ese día fue hincha de Racing”, detalla Cárdenas.
Pelé declaró una vez que en Argentina su equipo era Racing porque le gustaba la hinchada, la gente. Y el Chango cuenta que el origen del fanatismo del brasileño fue en la década del ’60: “Jugamos amistosos contra el Santos y vino a comer asados con nosotros. Decía que le gustaban los colores de la camiseta. Una vez, en medio de un partido, (Federico) Sacchi le tiró: ‘Negro, portate bien que vos sos de Racing, eh. Y Pelé se rió’”. Y Juan Domingo Perón también integra la lista, aunque Antonio Cafiero afirme lo contrario.
El folclore racinguista está rodeado de mitos, de historias tan insólitas que podrían ser parte de algún guión de Pedro Saborido. Pero que no, acá están: un club y una hinchada se apoderan de ellas. Y lo hacen sin ningún prurito, eh. Lo hacen (se lo creen, lo viven en carne propia, se enorgullecen), cuando en realidad muchos –¿el resto del fútbol argentino, quizás?– piensan todo lo contrario: creen que es ridículo. Porque parece mentira, pero parece que no.
(Véanlo con sus propios ojos)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario